sábado, agosto 26, 2006

SOBRE LA ERUBESCENCIA Y LA MODESTIA DE JOSÉ LUIS BLASCO 20/12/03


SOBRE LA ERUBESCENCIA Y LA MODESTIA DE JOSÉ LUÍS BLASCO LÓPEZ, PRESIDENTE DE LA ASOCIACIÓN DE ESTUDIOS MELILLENSES ( A. E. M. )

Juan Garbín es un poeta, que lo mismo le canta a Melilla sus bellezas como: “... la Melilla que teje sus días entre arco iris donde el azul palpita entre nosotros...”, que da a conocer, desde esta atalaya de sus alberos o esquinas periodísticas, a los melillenses personas que, por su modestia y humildad, son incapaces de descubrirse por si mismos; donde solamente lo hacen con timidez en sus artículos y publicaciones culturales en los distintos medios de comunicación. Leo en “Las Cuatro Esquinas” de 10 de diciembre datos personales y culturales de José Luís Blasco López que mucha gente en Melilla desconoce y que debieran ser públicos para que se le reconozca su valía personal y cultural en bien de la Historia de Melilla. Que es colaborador de las revistas “Trápana”, “Cuadernos de Historia de Melilla”, “Aldaba”, “Publicaciones de Magisterio”, para los diarios “El Telegrama de Melilla”, ”Sur”, “El Faro”, “MELILLA HOY”; es Miembro de Honor del Sindicato Nacional de Escritores Españoles, Secretario de la Real Cofradía del Nazareno, Legionario de Honor. También tiene una huella indeleble de casi una década, de su paso por la Orden Religiosa de los Franciscanos. Sé que José Luís tiene más cosas en su currículum personal, y más aun en su “Talega de la Historia” de nuestra ciudad; algunos eruditos le llamaría bagaje; yo soy más barbaján y le llamo “Talega”, con mayúsculas, porque es así como debiéramos tratar cuando hablamos de la Historia de Melilla. José Luís suele abrir su “Talega”, como lo haría cualquier persona para ayudar a algun necesitado cada vez que cualquier persona le solicita una información sobre nuestra ciudad. Debido a mis charlas semanales, muy egoísta por mi parte, lo acribillo a preguntas sobre datos e informes históricos. Él siempre servicial, muy paciente y con su modestia caraterística me “ilumina” el camino para que yo vaya descubriendo todo lo que deseo y así enriquecer mis humildes entendederas. En una de nuestras frecuentes charlas salió a colación el color de la bandera de Melilla. Yo, muy puesto, le dije que era azul con el escudo de los Guzmanes que todos conocemos; pero él con sus vastos conocimientos me dijo que la verdadera bandera de Melilla era el Gonfalón de Guerra de los Guzmanes: gallardete de tafetán con las dos calderas con las sierpes y como fondo el heráldico color azur (azul obscuro, no como el azul claro que tiene actualmente). La fuente de estos datos es la declaración jurada que hizo Fernández de Castro a finales de los años 40 del pasado siglo a las autoridades de la Ciudad, de la que José Luís fue el investigador que la sacó a la luz.
Como sé que a José Luís le daría rubor, debido a su humildad, por mi cuenta y por segunda vez en este año, voy a solicitar de todos los melillenses que amen nuestra Historia que se hagan socios de la Asociación de Estudios Melillenses que él preside desde hace más de diez años. Lo digo por los enamorados de nuestra Ciudad y por los abanderados melillistas que se encuentran allende los mares; a estos les recomiendo que escriban al apartado de Correos nº 258 de Melilla. A los que residen en la ciudad, solo tienen que subir al Torreón de San Juan nº 8, en El Pueblo.
Son solo 15,03 euros, o sea 2.500 de las antiguas pesetas, ...... ¡al año!. Sí señoras y señores, tan solo 1,25 euros al mes. Por si no lo saben les diré que en la A.E.M. se dedican al estudio y divulgación de temas históricos y antropológicos de todas las personas que han aportado sus conocimientos en favor de nuestra ciudad. Son altruistas al informarnos porque son así de generosos, pero Correos, por ejemplo, cobra por cada carta que cae en sus buzones, y con los que apoquinan -los socios honorarios, no, por eso, porque son honorarios-, creo que no hay suficiente. Cosa que este Organismo Postal, al que pertenecí 38 años ininterrumpidos, debiera tener una gracia especial para la A.E.M., ya que de lo que se trata es de divulgar la Historia de Melilla por medio de la cultura. Como el que no llora no mama, yo le pido al Jefe de Correos de Melilla, que sé que es hombre culto, que si tiene alguna atribución para ayudar a la A.E.M. que no lo dude y haga lo que pueda. Aunque sea darle aliento, postal en este caso. Pero las que debieran ayudar con más ahínco y sin reservas, son las Consejerías de Cultura y de Educación, porque de eso se trata, de educación y de cultura para todos los melillenses residentes y también para los que estamos fuera. Ya verán la de simpatizantes que tendrían, que más tarde se convertirían en papeletas contables en las urnas.
Lo siento José Luís, pero tenía que pedirlo, era como un gusanillo .
Recibe un abrazo extensivo a todos los miembros de la A.E.M. .


Juan J. Aranda
Málaga 14 diciembre 2003

ALGO SOBRE LA SUSPENSIÓN DE LOS SÍMBOLOS FRANQUISTAS Y UNA PETICIÓN SOBRE HORARIOS EN LOS ESTANQUES TANATORIOS 07/12/03


ALGO SOBRE LA SUSPENSIÓN DE LOS SÍMBOLOS FRANQUISTAS Y UNA PETICIÓN SOBRE HORARIOS EN LOS ESTANQUES NATATORIOS

Según El País el Ayuntamiento cántabro de Comillas, de 2.340 habitantes, (25.000 en verano), ha cambiado los nombres de las calles con resonancias preconstitucionales con los votos en contra del PP. La alcaldesa, la regionalista, María Teresa Noceda, dice que así homenajean a la Constitución. Esta mujer ha cambiado los nombres de Franco, José Antonio Primo de Rivera, General Solchaga, General Mola, por los de Constitución (la Pepa de 1812, y no la actual), Corro de Campíos, Antonio Gaudí, en su honor por la casa llamada “El Capricho” que el insigne arquitecto construyó para un amigo suyo, indiano millonario. Yo creo que el colectivo que quiere la supresión de los símbolos franquistas debe estar contento con esta noticia, pero insatisfechos con el nomenclator de las calles de Melilla. El Barrio de la Libertad con muchas de sus calles con nombres de falangistas es una incongruencia, que a mucha gente les molestará, pero ahí están, como la estatua de Franco a la entrada del puerto, que me dicen está otra vez de “grana y oro”; pintarrajeada sin razón alguna por unos jilipollas pintamonas que no tienen cojones de plantear democráticamente donde debe ser, la retirada de todos los símbolos del dictador, como ha hecho la alcaldesa de Comillas y no afear un mobiliario urbano que lo pagamos todos con nuestros impuestos, nos guste o nos disguste, y si no, que hagan hablar a las urnas. Creo que en la puerta del Instituto Nacional de Estadística, en la calle Luís de Sotomayor, no figura ningún símbolo constitucional, cosa que también es incongruente por ser un organismo oficial, y pienso que eso debe ser reparado. Ahí es donde también debe estar ese colectivo con sus reivindicaciones. Es mi opinión.
Desde estas líneas, y con toda la humildad y la modestia que puedan emitir mis palabras solicito, a ser posible, y si tienen a bién, de las autoridades que los estanques natatorios públicos, también llamados piscinas, abran una hora al día para los colectivos gays, otra hora para las lesbianas, otra para las mujeres judías, otra para las mujeres musulmanas, otra para las mujeres cristianas, otra para las mujeres hindúes, otra para los varones judíos, otra para los varones cristianos, otra para los varones hindúes, otra para los varones musulmanes, otra para los bomberos, otra para los funcionarios de Correos (los míos), otra para los policías nacionales, otra para los policías locales, otra para los de Hacienda, otra para los de Educación, otra para los varones inmigrantes (con o sin papeles), otra para las mujeres inmigrantes (con o sin papeles). Lo siento mucho, pero los políticos que se duchen en sus casas para que no sean molestados; que hay mucho pedigüeño por ahí, y no en una piscina, donde no se tiene por vestido nada más que un simple bañador, y como se suele decir: “Me has pillado en bañador y no tengo nada que darte”. Y como ya tenemos dieciocho horas cogidas, las seis restantes serán dedicadas a la limpieza y saneamiento riguroso de la piscina. Los que deseen acoplarse en los grupos de su sexo que más les agrade deben hacerlo pero nunca mezclados con el contrario. Por ejemplo: si a un varón vestido con bañador de los años cincuenta que se le note sus abultadas partes pudendas, o una mujer que lleve puesto uno modelo años veinte, que igualmente desea que su tetamen como sus carnosos muslos no sean observados por varón alguno, deben solicitar una hora indistinta y exclusiva para ellos en la ventanilla de eritrofobia, abierta en estos casos para personas ruborosas o pudorosas. ¡Ojo!, también queda terminantemente prohibido mear dentro de la piscina. Los meones serán cogidos infraganti al llevar el agua, aparte de la lejía que jode mucho los ojos, un producto químico que tiñe los meados de rojo, quedando alrededor del bañista meón o meona una aureola a la altura de su barriga, tipo flotador, que lo delataría al momento y sancionado con una multa de cuantía igual a un mal aparcamiento, que también jode lo suyo. Así que antes de introducirse en el agua, hay que mear lo que se tenga en la vejiga y pegarse una buena ducha, frotándose las axilas, los pies, por si alguna persona le huelen a Cabrales; pero lo más importante de estas duchas son la limpieza de las partes bajas y húmedas. Hay un bando a la sequía que el Alcalde de Madrid, el profesor Tierno Galván dictó en una de las épocas en que Madrid sufría la falta del líquido elemento, y dice así: “ Los madrileños, sin descuidar la curiosidad de sus hogares y el aseo de su cuerpo y partes en prevención de landres, incordios, bubas y tabardillos, habrán de medir con sumo tiento el agua en que aquéllos y otros menesteres empleen.” Lo de los tabardillos, landres, incordios y bubas no hay que tomarlo a broma porque son enfermedades muy jodidas y peligrosas, y si no, consulten a su médico.
Aquí queda mi humilde petición sobre las horas y los usos de baños en los estanques natatorios públicos.
Reciban un cordial saludo.


Juan J. Aranda
Málaga 8 diciembre 2003.

ALGO SOBRE UNA VIEJA ARAUCARIA Y LA VIOLENCIA EN LA COA 06/12/03

ALGO SOBRE UNA VIEJA ARAUCARIA Y LA VIOLENCIA EN LA C.O.A.


Hace casi cincuenta años, recién cumplida la comunión, en la Cañada o Castelar, en la librería Mateo, me prestaron un pequeño libro de poemas de un comunista chileno con la recomendación de no decir de donde lo pude encontrar. Era cuando se escuchaba por la radio un toque de clarín en el Parte de mediodía. Varias décadas después cayó en mis manos otro libro del mismo autor en el que dice sobre las palabras (castellano): “Qué buen idioma el mío, qué buena lengua heredamos de los conquistadores torvos... Estos andaban a zancadas por las tremendas cordilleras de las Américas encrespadas, buscando patatas, tabaco negro, oro, maíz, con aquél apetito voraz que nunca se ha visto en el mundo. Todo se lo tragaban, con religiones, tribus, idolatrías iguales a las que ellos traían en sus grandes bolsas. Por donde pasaban quedaba arrasada la tierra. Pero a los bárbaros se les caían de las botas, de las barbas, de los yelmos, como piedrecitas, las palabras luminosas que se quedaron aquí resplandecientes.... el idioma. Salimos perdiendo. Salimos ganando. Se llevaron el oro y nos dejaron el oro. Se lo llevaron todo y nos dejaron todo. Nos dejaron las palabras”. Este comunista como todo el mundo sabe era Pablo Neruda, y no tenía rabo ni cuernos, y viene al caso que nos ocupa porque nació en la Araucanía de Chile, de donde es originario el árbol “Araucaria”, con ere (erre sencilla); conífera que crece hasta los 50 metros de altura. Bueno, pues me han dicho que la conífera araucaria que estaba plantada en el patio de la casa del doctor Gámez Morón en la antigua calle A de Ataque Seco, avenida de Cándido Lobera o Cuesta del Kursaal (como mi madre decía) la han talado, ya no está para dar sombra; así, sin más. Yo recuerdo ese árbol desde que empezaba a razonar, o sea, desde chiquitillo. Desde que mi padre me llevaba en la regadera de bomberos para llenar el tanque en la aguada junto a la casa del “médico de los niños” para regar las calles céntricas o llevar agua a los barcos atracados en el puerto o a los barrios donde no llegaba ese suministro. Imagino que los amantes de los animales y plantas habrán protestado. Yo, de momento, protesto así, muy cabreado, como cuando maltratan a un perro y lo dejan abandonado, ya que ambos son seres vivos y sufren cuando se les dañan. El gemido de un perro es la manera de comunicarnos que está siendo agredido, y su ladrido cuando intenta atacar para defender su propiedad o que siente temor; pero el árbol ni gime ni ladra, solo nos da frutos y sombra y también albergue para los pájaros, siendo la manera de decirnos que nos quiere y agradece cuando lo regamos, igual que las flores y las demás plantas nos deleitan agradeciéndonos con sus fragancias. Si alguno de ustedes lo puede hacer con mas enjundia, háganlo.
El día tres de diciembre leo en este periódico: “La COA suspenderá la línea de Mariguari si continúan las agresiones”. Por lo visto los conductores “no aguantan más” la inseguridad que sufren en este trayecto. El señor Albadalejo, presidente de la compañía, insta a los padres a que “reeduquen” a sus hijos. “Se debía concienciar a los familiares de estos niños para que nos ayuden a solucionar esta situación .” El señor Albadalejo, con su bondad, para que se solucionen las cosas por la vía del diálogo dice “reeducar”; y yo me pregunto: ¿Alguna vez han estado educados, y perdida su educación, esos gamberros jilipollas, para que vuelvan a ser reeducados de nuevo?. Mi respuesta es : NO. También les llama: niños; calificativo erróneo, porque esos “nenes” deben tener sus bolsas escrotales tan negras como los del burro del señor Valero de la calle de Castellón. Yo recuerdo que un juez de Granada, que hace pocos fue conferenciante en Melilla, castiga a estos niños de grandes zigotos a cumplir penas tan peculiares como las de educarse trabajando en reponer lo que han dañado. Claro está que la implicación de sus papás es fundamental, y así éstos también se “reeducarían” cuando fuesen obligados a que sus vástagos vuelvan al redil de las buenas maneras y costumbres, como cualquier persona civilizada en un país como es España.





Juan J. Aranda
Málaga 8 diciembre 2003

PROPUESTAS PARA DEFINIR AL LECTOR IDEAL 01/12/03



PROPUESTAS PARA DEFINIR AL LECTOR IDEAL

El lector ideal es el escritor en el instante anterior a la escritura.
El lector ideal no reconstruye un texto: lo recrea.
El lector ideal no sigue el hilo de la narración: avanza con él.
Un célebre programa de radio para niños en la BBC siempre comenzaba con la pregunta: “ ¿ Estáis sentados cómodamente?. Entonces podemos empezar. El lector ideal sabe sentarse cómodamente.
Imágenes de San Jerónimo lo muestran detenido en su traducción de la Biblia, escuchando la palabra de Dios. El lector idean debe aprender a escuchar.
El lector ideal es un traductor. Es capaz de desmenuzar un texto, retirarle la piel, cortarlo hasta la médula, seguir cada arteria y cada vena, y luego poner en pie a un nuevo ser viviente. El lector ideal no es un taxidermista.
El lector ideal existe en el momento que precede a la creación.
Para el lector ideal, todos los recursos literarios son familiares.
Para el lector ideal, toda anécdota es novedosa.
“Uno debe ser algo inventor àra leer bien”. (Ralph Waldo Emerson).
El lector ideal tiene una ilimitada capacidad de olvido. Puede borrar de su memoria el hecho de que el Dr. Jekyll y Mr. Hyde son la misma persona, que Julien Sorel serásecapitado, que el nombre del asesino de Roger Ackroyd le es desconocido.El lector ideal sabe aquello que el escritor sólo intuye.
El lector ideal subvierte el texto.
El lector ideal no se fía de la palabra del escritor.
El lector ideal procede por acumulación: cada vez que lee un texto, agrega una nueva capa de memoria al cuento.
Todo lector ideal es un lector asociativo. Lee como si todos los libros fueran la obra de un único escritor, prolífico e intemporal.
El lector ideal no puede volcar su conocimiento en palabras.
Al cerrar un libro, el lector idealsiente, que de no haberlo leído, el mundo sería más pobre.
El lector ideal es como Joseph Joubert que arrancaba de los libros de su biblioteca las páginas que no le gustaban.
El lector ideal tiene un perverso sentido del humor.
El lector ideal nunca cuenta sus libros.
El lector ideal es a la vez generoso y avaro.
El lector ideal lee toda literatura como si fuera anónima.
El lector ideal usa con placer el diccionario.
El lector ideal juzga a un libro por su cubierta.
Al leer un libro de hace siglos, el lector ideal se siente inmortal.
El lector ideal no sabe si es o no el lector ideal hasta después de acabado el libro.
El lector ideal comparte la ética de Don Quijote, el deseo de Madame Bovaru, el espíritu aventurero de Ulises, la desfachatez de Zazie, al menos mientras dura la narración.
El lector ideal es politeísta.
El lector ideal lee para encontrar preguntas.
Todo libro bueno o malo tiene su lector ideal.
Para el lector ideal, todo libroes, en cierta medida, su autobiografía.
El lector ideal no tiene una nacionalidad precisa.
A veces, un escritor debe esperar varios siglos para encontrar a su lector ideal.
El lector ideal según Stendhal: “ Escribo para apenas cien lectores, para seres infelices, amables, ancantadores, nunca morales o hipócritas, a quienes me gustaría complacer. Apenas si conozco uno o dos.”.
El lector ideal cambia con la edad.
El lector ideal de los Veinte poemas de amor de Neruda a los catorce años puede no serlo a los treinta. La experiencia empaña ciertas lecturas.
Pinochet, al prohibir Don Quijote por temor a que el libro pudiera leerse como una defensa de la desobediencia civil, fue su lector ideal.
El lector ideal nunca agota la geografía de un libro.
El lector ideal debe estar dispuesto a no sólo suspender su incredulidad sino a adoptar una nueva fe.
El lector ideal nunca dice: “Si solamente.....”.
Escribir en los márgenes de un libro es marca de un lector ideal.
El lector ideal proselitiza.
El lector ideal es veleidoso sin sentirse jamás culpable.
El lector ideal puede enamorarse de al menos uno de los ersonajes de un libro.
“Hay tres clases de lectores: la primera, aquéllos que gustan de un libro sin juzgarlo; la tercera, aquéllos que lo juzgan sin gustarlo; y otra, entre las dos, que juzgan mientras gustan de un libro y gustan de un libro mientras lo juzgan. Estos últimosdan nueva vida a una obra de arte, y no son muchos”. Goethe en una carta a Friedrich Rochlitz.
El lector ideal es pocas veces sentimental.
El lector ideal desea llegar al final del libro y, al mismo tiempo, que el libro no acabe.
El lector ideal nunca se impacienta.
El lector ideal es ( o parece ser ) más inteligente que el escritor. Pero no por eso lo menoscaba.
Llega un momento en que todo lector se con sidera un lector ideal.
Las buenas intenciones no producen lectores ideales.
El lector ideal es el personaje principal de la novela.
El lector ideal es alguien con quien el escritor podría pasar la noche a gusto, con una copa de vino.
No debe confundirse lector ideal con lector virtual.
La literatura depende, no de lectores ideales, sino de lectores suficientemente buenos.
Un escritor nunca es su propio lector ideal.

ENHORABUENA AL RAPSODA DE MELILLA 28/11/03

ENHORABUENA AL RAPSODA DE MELILLA, ELADIO ALGARRA

Aunque tarde, debido a la distancia de las dos orillas, quiero dar mi enhorabuena al Rapsoda de Melilla, señor Eladio Algarra Jiménez, por ser nombrado Miembro de Honor de UNESCO. Lo de Rapsoda de Melilla es un título que yo humildemente le he otorgado, y además lo he escrito en mayúsculas porque, como en la antigua Grecia hacían los que cantaban o recitaban trozos de poemas homéricos, Eladio lo hace a nuestra ciudad, Melilla, a El Pueblo, siendo épicos todos ellos. La prueba la tenemos cada domingo en el suplemento La Voz de este periódico. Es un comunicador que pone poesía en todo lo que ve o piensa. Como le dice Garbín, otro que escribe desde su nefelismo poético con todo el amor hacia nuestra ciudad de nuestros amores : “Tus versos, Eladio, emanan desde las entrañas azules de nuestra tierra ”. Yo creo que igualmente emanan desde su prudencia y su gran humildad. Así lo refleja en todos sus escritos . El poema al Monumento a los Mártires de las Campañas de la Plaza de España en La Imagen y el Verso, donde dice cosas como : “ (....) En piedra levantina , la Victoria y el Obelisco , / luminosa Fuente, con las Tres Tazas, / simbolizan en ti, Monumento, el Alto Heroísmo, / bajo relieves, a la “Mater Hispana”. / Y la Placa, leyendo en carne y sangre: “ MELILLA A LOS HÉROES DE LAS CAMPAÑAS”, / compendio y credo, tributo y gala capitana, / de voluntarios, almas anónimas, caballeros militares.” Su “Estorninos y golondrinas en el cielo de Melilla” le hizo acreedor de un primer premio aquí en Málaga, acto que tuve el privilegio de presenciar y escuchar de su propia voz su galardonado poema.
Y ahora que están un poco revueltas las aguas de la rotulación de los nombres de varias calles de Melilla, mi pregunta, a bote pronto, es : ¿Porqué no colocar el nombre de Eladio Algarra en una de las esquinas de cualquier calle de la ciudad ?. ¿ Y por qué no, ¡eh! ?. Méritos tiene más que cualquiera de los 25 ríos que hay rotulados; más que la del absurdo nombre “Paralela al Sol”. Y si ya nos vamos a la incongruencia rayana en lo incoherente, tenemos a “Napoleón”. Que alguien me diga, si este general hizo algún bien a la ciudad para que ésta rotule una calle con su nombre, ¡Vamos, venga ya, hombre! y que lo descuelguen de una vez y coloquen el de Algarra, ya que a mi maestro de música no le hacen caso en mis sempiternas peticiones, y miren que también fue un hacedor de mentes musicales; todas de niños melillenses.
Eladio: desde esta otra orilla, recibe un cordial abrazo y sigue deleitándonos con tus versos llenos de amor a nuestra ciudad.


Juan J. Aranda
Málaga 29 noviembre 2003

POEMAS NOVIEMBRE 2003

POEMAS NOVIEMBRE 2003

A la atención de Eladio Algarra para su publicación cuando sea conveniente. Saludos


En las escaleras de la Marina
Centenarios torreones al sol.
Un soldado recluta hace guardia.
Verdad que triste se encuentra
Dentro de su torpe aliño indumentario.
Siente hambre de madre y
Sed de su lejana montañosa tierra.
Es de Potes y su nombre
Benigno.






Poema desempolvado de hace casi cuatro décadas. Una día que me tocó hacer la “desinfección”
con mi amigo Betoret Paneque en la Compañía de Mar, allá en 1966.



















Solo tú, Melilla,
Lejana y cercana.
Con mis anhelos y deseos,
De siempre solo tú,
Melilla lejana y cercana
Siempre estás en mi corazón.












Con cariño hacia mi ciudad




















Para unos algunas palabras pinchan
Y para otros son amorosas.
Igual que los rosales pinchan
Y se les cogen las rosas.




No es mío, pero ¿ a que es bello y hermoso?.
Por eso deseo que la publiqueis. Con mi agradecimiento









Algunas mujeres con los ojos dicen:
”Júrgame”,
Y con el corazón:
“Como me jurgues, te mato”.





Con cariño para todas las mujeres,
y en especial a mi esposa Ana


















“Lo asió por las partes bajas, y primero que lo soltó, dió con él muerto en tierra (.....) saliéndose con las criadillas en la mano”.
(Barrionuevo)


Yo se lo aplico a los cabrones y cobardes que maltratan y matan a sus parejas






























Con una blusa de flores la Primavera
Guapa y amante cubre
Cada vez que sale al viento,
Al árbol que la pretende.




Dos grandes pensiles
Como pañuelos de flores,
Son los hermanos melillenses,
Hernández y Lobera.
Mis parques.
.





A la Primavera y a nuestros parques






















La ciudad cabe en mi alma
Es azul y española,
En África se encuentra
Como un pensil recién regado.




A Melilla, con cariño.
























Clara y transparente poesía, escrita con el devoto cariño y con el amor lleno de armonía. Aunque los versos sean pobres de rimbombante asonancia de acordeón, intento que siempre sean ricos de palabras cargadas de afecto en el lenguaje poético. Versos largos nocturnos, rayando con suavidad el silencio. Queriendo mover el alma e intentar limpiarla de pensamientos erróneos. Deseando refrescar la sequedad del estío bajo una sombra y calentar las frías noches invernales en el hogar. El poeta (yo intento serlo) aunque salga por la línea tangente de sus versos libres, sin metro fijo o determinado, siempre está de acuerdo con sus escritos. Algunas veces y sin notarlo apenas, a mi me sale la vena lírica donde torpemente intento comunicar mis propias emociones. Es donde hablo de los seres amados que se fueron y de los que aún me quedan. Los poemas con versos imbricados, pero marchitos, con aire viejo y de olor a cueva húmeda como las minas en las entrañas de El Pueblo o de La Alcazaba, los leo con atención y al final del último verso me hace ser dormitivo; pero siempre ilustran mi alma, como los que siempre dedico a mi familía.
Yo pienso que el escribir es como viajar en una nube donde nadie puede verte, a no ser que use unos prismaticos (te lean).


La Purísima, cementerio con árboles duros e invernizos en su entrada, y de flores frescas en sus blancos patios marmóreos. Allí fue con dolor donde los abandoné en sus tumbas silenciosas. Rodeados de héroes desconocidos junto a sus padres, mis abuelos. Todos ellos amparados por el brillante Angel con sus alas de bronce agitándolas y saludando al mar que tanto amaron.












Juan J. Aranda







Atesoro en mi mente calles y gente, donde las nubes blancas de las mañanas acariciaban los tejados luminosos de mi barrio. Había días que en la suave luz del atardecer se palpaba un silencio de sosiego por las estrechas alamedas mal cuidadas del Lobera; parque que servía de juegos en su frontón y de amores escondidos en sus bancos de piedra. Las niñas de la Divina Infantita retozaban cercanas a nosotros, niños de pantalones cortos por la rodillas, intercambiando notas de curioso amor infantil bajo la atenta y benévola mirada de la monja carabina. Estas niñas eran corcheas y semicorcheas melódicas de cristal como las alas de las mariposas flotando entre los rayos de sol de un atardecer. Algunas tardes que no venían nos parecían bucólicas y se podían escuchar los sonidos de la naturaleza, de nuestras pisadas sobre las agujas muertas de los pinos, donde solo eran interrumpidos por el trino de los pájaros o de algún motor ahogado de un coche subiendo la cuesta del Kursaal, como la llamaba mi madre. El guarda-parques, con su sempiterno cigarrillo en los labios, decía que eran los niños meones y revoltosos quienes los destrozaban, cuando la realidad era que no había suficientes jardineros para cuidar sus pensiles. Estos niños (yo entre ellos) iban algunas tardes de verano a La Alcazaba, cuando las olas en la Ensenada de los Galápagos lamían con suavidad la arena de la pequeña playa, impregnando de yodo y salitre el aire del estío. A veces nadábamos con temor porque decían que allí se refugiaba un lobo marino que tenía su familia en Las Chafarinas. Cuando lo hacíamos en busca de mejillones (algunos decían morcillones) hacia las rocas de la pequeña tana nuestros gritos infantiles resonaban entre las barbacanas de la Muralla Real como un órgano ronco falto de un luthier, levantando la densa calma abovedada y algún grito y mirada conminatoria desde el puente del estrecho, húmedo y largo túnel de La Alcazaba.
En invierno a veces la lluvia, con sus rúbricas del cielo, parecía un pariente del demonio acoplándose con las azules aguas de sus acantilados bramando con fiereza.




En recuerdo de mi amigo y vecino Rogelio Jiménez Rodríguez, cuarto de seis hermanos, que quedó cojo al caer por las rocas de La Alcazaba. No tenía ni diez años.














El niño, de comunión cumplida, no era tonto pero iba siempre detrás de su sombra para atraparla. Era Agapito, feísimo y único hijo. Nombre de risa que rima con pito y también con que me irrito. Por eso siempre que oía su nombre en plan de guasa y de chufla, tocábase su bragueta de dos botones, respondiendo: “tócame el pito”. Su madre, también de nombre con risa, era la señora Prisca, rimando con arisca, que lo era mucho, y con sus voces y pisadas alocadas de trisca. El padre era el señor Odón, siempre zamborondón y en su casa, lógicamente, era el segundón sin ser respondón, que rima igualmente con lo que están ustedes pensando: el condón. Pobre señor Odón al que llamaban con escarnio, por usarlo a menudo: señor Condón. También le gustaba sestear su nube etílica, cogida en Casa Carmelo en la Cañada, toda llena de Valdepeñas. En verano su puerta era baldeada cada tarde para refrescarla de la solanera del mediodía. La madre, sin ser fina ni ilustrada decía: “Voy a enlustrecer mi hogar”, dejándolo con olor a comida rancia y a cebolla y limones podridos que siempre compraba a últimas horas en el Rastro, por su baratura.
Cuando el sol aún se resistía dejarle paso a la luna las muchachas pasaban muy acicaladas, con resto de vinagre en sus suaves y poco aclarados cabellos, y perfumadas con agua de olor, como mi abuela llamaba a la colonia. Todas iban con sus mejores vestidos, contoneándose con gracia, muy ufanas y risueñas de algo que solo ellas sabían. Al final de la calle al doblar la esquina de un callejón, letrina de los niños y de algún borrachín de esfínter dilatado, siempre asomaban dos o tres mocetones recién lavados y engominados con sus ropas domingueras. El Nacional, en segunda sección de tarde primero, y a la salida La Flor de Melilla, La Cave y la Avenida con su paseo sin coches, los esperaban hasta que el toque de retreta sonaba en todos los cuarteles.


Esto es una historia inventada que pudo ocurrir en la Melilla de mi niñez.














RECUERDOS


Las mañanas eran silenciosas donde solo se escuchaban como una ligera brisa, a través de las calles de Castellón y Duque de la Torre, las campanas del Sagrado Corazón. La voz del “ropavieja”, que te cambiaba un pantalón engolillado y envejecido por un jarrillo de lata o por un vaso de duralex. El anacrónico y romántico cañonazo, antaño de los libertos del Presidio, de las doce del mediodía, disparado desde la Batería de Costa en lo alto del cerro de Ataque Seco, eran como la señal de salida de una carrera de velocidad donde los niños del colegio de Ataque Seco, ahora llamado España, salíamos como animales despavoridos por las escaleras bajo las regañinas de don Domingo y de Villalta, el conserje que repartía la leche en polvo y cortaba el queso, donde dos manos se estrechaban; limosna de los americanos en porciones lo más equitativas que podía y que a veces servía de purgante para algunos de nosotros muchas mañanas invernales cuando formábamos militarmente en el patio antes de entrar en clase. Las doce del mediodía era la hora de la venida de muchas mujeres del vetusto mercado de la calle del General Margallo. Algunas de ellas iban al Polígono porque decían que las verduras y hortalizas eran más baratas. Algunos puestos del Rastro no lo eran tales porque carecían de mesas expendedoras y las despachaban amontonadas en el suelo sobre unos sacos húmedos. Los cafetines estaban llenos de gente; donde la mayoría de parroquianos consumían a pequeños sorbos un vaso de té en varias horas de cháchara. Los pequeños y fuertes borricos ungulados, con grandes albardas vacías y con sus largas orejas peludas, esperaban pacientemente a la puerta del cafetín, que solo movían como requiebro amoroso al ver pasar una de sus congéneres, llevando como carga un señor con chilaba parda, en pleno verano, y rozando sus babuchas por el suelo. El rebuzno-piropo era soltado si a la “dama” se la veía receptiva.
Los bares “La Maja” y “El Mortero” se hallaban cada uno en una esquina del antiguo edificio cuadrilongo, y en el centro de la acera, en una vieja trapería, se podía comprar desde un viejo y oxidado clavo a una romana recién hecha por encargo, con más pena que gloria, por el herrero, de gran cacumen inteligente, cercano a los zapateros remendones, donde todos eran judíos, incluído el señor Alberto, el latero. Pepe el carbonero era cristiano.


Cualquier día en Melilla en los años 1940 y 1950.














A MANUEL PALOMO 17/11/03

A MANUEL PALOMO, PRESIDENTE DE LA ASOCIACION CULTURAL DE ANTIGUOS RESIDENTES DE VILLA SANJURJO-ALHUCEMAS Y DEL MUSEO MAPAL EN MADRID.


Tengo ante mí una carta que Manuel Palomo, Presidente de la Asociación Cultural Antiguos Residentes de Villa Sanjurjo-Alhucemas con sede en Madrid, dirige al Defensor del Pueblo solicitando de “su benevolencia” que le indique si las reclamaciones que formula están bien dirigidas o debe enviarlas a otra Institución. Quede claro que Manolo Palomo hace sus reclamaciones en nombre del colectivo de españoles repatriados que tuvieron que salir, algunos con lo puesto, del Protectorado en 1956. Su alegato no tiene desperdicio alguno. Dice, y con toda la razón del mundo, que a algunos colectivos, como el de abogados, cobraron 150.000 pesetas de la época. A los funcionarios y militares se les dieron viviendas y como es lógico conservaron sus puestos de trabajo; pero a los civiles, gente currante como pescadores, panaderos, fontaneros, soldadores, mecánicos, albañiles que no tenían acceso al BOE, (que no se enteraron de nada) se fueron con una mano atrás y otra delante. Dice que el Gobierno (yo digo que más bien es el Estado) está en deuda con todos los españoles que nacieron en el Protectorado y que España (el Gobierno de Franco) repatrió por toda su geografía, por lo que solicita UNA SUBVENCIÓN O INDEMNIZACIÓN (lo pone con mayúsculas para que resalte) como la que recibió el colectivo de abogados de Tetuán, o lo que han recibido los militares de la otra zona. Creo que se refiere a las indemnizaciones, auspiciadas por el PSOE cuando gobernaba, y que con todos los derechos han cobrado, ya ancianos, algunos militares republicanos. También se refiere a los Padres de la Constitución que ni siquiera los mencionan en la Carta Magna. “¿No tenían ninguno de estos congresistas un familiar en Marruecos?. ¿ Qué pasa, es que no somos hijos de Dios y de los españoles que dieron sus vidas por España en África?. ¿No tenemos derecho?, ¿no podemos tener un lugar para reunirnos”. Piden un local donde poder reunirse los miembros de la asociación. Además este local serviría para su museo, que ya es conocido en la Subdirección General de Patrimonio Histórico-Artístico de la Dirección General del Ministerio de Defensa. También el Almirante Director del Museo Naval le solicita copias fotográficas sobre el desembarco de Alhucemas, de los que este museo no conserva ninguna. El Museo del Ejercito le comunica que no acepta ninguna fotografía sobre ese desembarco para ser exhibida, y le remite al Museo de Aeronáutica de Aviación, sito en Cuatro Vientos, o también al Museo del Aire. El Presidente del Gobierno, señor Aznar, le da las gracias por la invitación a que visite el museo pero: “......lamentablemente compromisos de trabajo ya contraídos para esa fecha no me lo van a permitir”.
O sea que nuestro amigo Manolo se ha dirigido por escrito a todos los estamentos oficiales donde podrían empujarle para que el museo que posee su asociación sea visitado por todas las personas que lo deseen.
Enseñar nuestra cultura, nuestra lengua, nuestra labor en Marruecos, dice que no está reconocida por nadie. Quizás no lo esté por algunos políticos ignorantes, que haberlos haylos, que es lo que más te duele Manolo, como a tantos españoles repatriados del antiguo Protectorado y residentes en esas tierras africanas de Ceuta y de Melilla. Fíjate que actualmente los melillenses y ceutíes tenemos que aguantar la impertinencia de un señor, diplomático jubilado, que nada más y nada menos dice que “hay que retrotraer las Plazas a Marruecos”. Este es uno de los sapos venenosos que los naturales de Ceuta y de Melilla estamos acostumbrados a tragar de vez en cuando, eso es sin contar las “peladillas” con almendras amargas reivindicativas que nuestro vecino nos regala de vez en cuando. Permíteme que te diga que nuestra cultura sí que está ahí, en tu pueblo, Alhucemas, como en todos los que España ha pisado llevando nuestro rico idioma de Cervantes.
Desde Málaga te deseo que la Asociación y el Museo que presides alcance lo que te has propuesto. Al menos en Melilla quedan enterados y en todas las Casas de Melilla en la Península y Jerusalén, que allí también hay muchos melillenses que añoran nuestra ciudad y leen este periódico.

Juan J. Aranda
Málaga 17 noviembre 2003

IGUALDAD Y DEMOCRACIA 09/11/03


IGUALDAD Y DEMOCRACIA

Según un grabado de un periódico de Turín en 1905, el dibujante Pascualino, dibuja al Rey Alfonso XIII y al Presidente Loubet de Francia montados en su carroza. Una bomba estalla en las cercanías y el rey pregunta : “¿ Es para mí, o para vos ? ”. El Presidente le contesta : “ Es para ambos, Majestad. Recuerde que nos hallamos en el país de la igualdad ”. Entonces en España las ideas se imponían y no se proponían como actualmente se hace en el Parlamento. Años mas tarde, durante los años del régimen de Franco una parte de la prensa podía ser multada y secuestrada. Y solo era por poner en duda su gobierno. Quien osaba meterse de lleno y “profanarlo” con sus artículos podía ser expulsado al gran boquete del ostracismo del Régimen. Yo entiendo la libertad y la democracia como un pensil al que debemos cuidar siempre, y también el doblegarse de vez en cuando a las opiniones de los demás.

ALGO DE GENEALOGIA 25/10/03

ALGO DE GENEALOGIA

Hace unos días, a propósito de la búsqueda de mis antepasados, para confeccionar mi árbol genealógico por varios juzgados, registros e iglesias de algunos pueblos de Andalucía me topé con un señor muy entendido en genealogía que me dijo más o menos que nosotros los españoles solamente podemos encontrar hasta la novena generación anterior a la nuestra. A no ser que los libros en los registros se encuentren en un buen estado para poder consultarlos y cotejarlos y comprobar su veracidad, como es el caso de mis antepasados por línea paterna –madre de mi padre- cuya procedencia es Ardales, un pueblecito de la província malagueña, que se remonta al año de 1550 y termina en nuestros días, siendo doce generaciones las que he podido contar. Las otras líneas se me van perdiendo en las ramas del árbol, llegando a la conclusión y así dejar de indagar más, de quedarme hasta mis bisabuelos. Tengo que decir, según este mismo amable señor, que los registros civiles empiezan a funcionar como tales en los años de 1875-1876. Los nacidos con anterioridad a estas fechas habrá de buscarlos en las parroquias e iglesias.
Yo siempre digo que mi abuelo paterno, Antonio, está sentado a la grupa de un caballo o de un mulo en la punta de una rama de nuestro árbol, siempre riendo de todo lo que observa desde su atalaya. El otro, el materno, Paco, lo veo con su gran mostacho columpiarse en la otra rodeado de cartas y paquetes postales con olor de lacres, un poco distante y algo serio. Ellos eran así. A uno le gustaban los animales y montaba y calzaba –herraba- toda clase de bestias y el otro, como era funcionario de Correos desde princípios del siglo XX en Melilla, no dejaba núnca de leer, “vicio” que muchos de sus hijos y nietos hemos heredado.

REPLICA A E. M. BLANCO 25/10/03

REPLICA A E. M. BLANCO
En la Tribuna Pública del sábado 18 de octubre he podido leer lo que dice una persona, no sé si es hombre o mujer, porque firma E. M. Blanco. E. M. Blanco pone al señor Rodríguez Zapatero como chupa de dómine, como lo hace un buen señor, antiguo militante socialista lleno de resentimiento, de vez en cuando. Como estamos en un país donde la democracia es la que rige nuestros destinos gracias a unas cajitas que nos proporcionan los gobiernos de turno cada cuatro años en los colegios, creo que me asiste un derecho de réplica a esta persona, ya sea macho o hembra, o mujer o hombre, o dama o caballero, según su sexo.
Empezando por el entrecomillado “ilustre”, viéndose que es con recochineo, como llama al Secretario General del PSOE, señor Rodríguez Zapatero, elegido entre los compañeros de su partido y no a dedazo limpio por un omnipotente, omnipresente, omnisciente, omnímodo e indiscutible líder que ha tenido a sus militantes en vilo durante meses deshojando la margarita de su sucesión. Como digo, fue elegido por su partido mediante votación, partido votado en varias legislaturas por varios millones de españoles y que se mantuvo en el Gobierno durante 14 años. En las hemerotecas aun se puede leer lo que el señor Luís María Ansón decía sobre cómo derribar a Felipe González: “Para terminar con González se rozó la estabilidad del Estado” (revista Tiempo, febrero de 1998). Como este espacio es limitado y no se puede abusar le diré que sobre la trama o conspiración que se le hizo a Felipe González puede enriquecer sus conocimientos y enterarse de lo que ocurrió por los periódicos de la época y en las revistas Tiempo y Siglo de febrero y marzo de 1998.
Sobre el entrecomillado “invasión” de Irak que dice que el señor Rodríguez Zapatero condena, como también muchos miles de españoles, en los que me incluyo, mi modestísima opinión es que debiera de haber omitido las comillas porque la invasión fue real. Al señor Solana le llama “correligionario de Zapatero esperpéntico Ministro de exteriores, de la UE (sic), se la cogen con papel de fumar en algunos asuntos internacionales”. No sé si los señores Rodríguez Zapatero y Solana cuando van a miccionar, ergo mear, se cogen sus pililas con papel de fumar, como usted dice, cuando debaten temas internacionales, lo que sí creo que, como el omnipresente e indiscutible líder hace, porque es su obligación, como hacía el “pedigüeño” González abrocharse los machos para que no quedemos con el “culo al viento”, como en las manifestaciones contra la guerra de Irak, contra el chapapote de mierda en las playas de Galicia y en toda la cornisa cantábrica, mientras los responsables cazaban; lo de la última huelga general y la actuación en la televisión pública del locutor obligado a rectificar por los tribunales para que dijese la verdad, que realmente fue una huelga general y no un paro de algunos sectores. Y para mas recochineo, burla y escarnio hacia un sindicato que representa a miles de trabajadores lo dijo sobre un fondo negro, como sus pensamientos en aquéllos momentos, y deletreando las siglas de Comisiones Obreras: “ce, ce, o, o”.
Y ahora vamos a ver esa casa de lenocinio (sin comillas dice) a la que usted se refiere: “ El señor Rodríguez Zapatero ve la astilla en el ojo ajeno, pero no es capaz de poner un poco de orden en un partido que cada día se asemeja mas a una casa de lenocinio sin dueño, con tanto “clan”; y tanto proletario revanchista convertido en burgués - ¿consistirá eso en ser progresista?- luchando para ver quien saca mas “trinque” de la política y se puede comprar mas “pisos en Mallorca; un partido que debería estar llamado a gobernar España algún día –Dios no lo permita, si siguen así las cosas”. Todo esto debió escribirlo usted de un tirón. No se paró ni un momento a pensar que los lectores pueden creer u opinar que usted, al asegurar que el PSOE se asemeja cada día a una casa de lenocinio, conoce esas casas de relaciones amorosas irregulares entre hombres y mujeres, lo que todo el mundo conoce como una casa de putas, con todos mis respetos a esas trabajadores del fornicio tan denostadas desde el principio de los tiempos. Pero de verdad usted cree que una casa de putas no tiene amo o ama. Yo siempre he creído que tenían hasta palanganeras. Si hubiese escrito algo que se pareciese a la “Casa de la Troya” hubiese quedado más elegante, y no eso de lenocinio tan vulgar, en fin, es su opinión. Sepa usted que era en la antigua Roma donde un pobre solamente podía servir al estado con su prole, de ahí la palabra proletariado. Sobre proletario revanchista convertido en burgués, pues muy bien, pues me alegro que el señor Zapatero pertenezca a la clase media, a una posición acomodada. Yo me cuento en el grupo social intermedio entre la burguesía y el proletariado. Lo de comprar pisos en Mallorca no lo he entendido muy bien, de verdad. Lo del orden, quizás lleve razón, a veces pienso que son unos tontorrones al elegir a compañeros de viaje; lo digo por incluir en las listas por Madrid a dos desvergonzados ladrilleros, que fueron fulminantemente echados del partido al conocerse su probada traición. Lo del “trinque” entrecomillado, ni puta idea. Lo de la astilla en el ojo ajeno, creo que lo que realmente ve es una viga como la de los balcones de El Pueblo, pero como es tan buena persona solo ve una astilla. La prueba es que contesta a los insultos con propuestas. No vea usted si tuviéramos un currelo como el señor del PP de Madrid, que cobraba casi medio millón de las antiguas pesetas al mes por asesorar una modesta empresa de fotocopias. Eso sí que es asesoramiento y lo demás una pamplina. Lo de estar llamado a gobernar España, creo que su partido ya gobernó y mucha gente cree que no lo hizo tan mal. Por el entorno en que vivo se pueden ver los logros, pero uno de ellos y quizás el más emblemática es el AVE de Sevilla, que por aquéllos años era un escándalo para la entonces verdadera, desleal y feroz oposición (léase hemerotecas), y que si Felipe González y su gobierno, el de nefasta memoria, según dice usted, no lo hubiera construido, Sevilla estaría sin su tren de alta velocidad, lo mismo que las autovías que enlazan las ocho capitales andaluzas. Claro que ahora los socavones y boquetes que existen en el AVE a Lérida el ministro de Fomento dice que no pasa nada. Sus razones tendrá el hombre, que para eso es ministro y tiene buenos asesores como los 60 (sesenta) conque cuenta el alcalde de Málaga, del PP, según se ha podido oír en la radio y leer en la prensa. Y tampoco pasa nada.
Menos mal que dice que el señor Rodríguez Zapatero es educado . “Algo mas que sus inefables camaradas señores. González y Guerra, ambos de nefasta memoria; un pequeño títere de guiñol”. Bueno, le diré que lo de inefable está muy bien porque no se puede expresar con palabras lo extraordinario que han llegado a ser cuando gobernaban, según sus mayorías absolutas. Luego pega un volantazo hacia lo nefasto, que es lo mismo que decir desgraciada la influencia de ambos con el líder socialista. Hombre, lo de títere de guiñol permítame decirle que vea los de Canal + que caricaturizan a todo bicho viviente, políticos, deportistas, gente de la farándula y de la prensa rosa, donde hace pocos días se podía ver la caricatura del señor Busch moviendo la de nuestro presidente del Gobierno. A mí me pareció algo bochornoso, que quiere que le diga. Sobre el “algo mas educado que sus inefables...”, uno fue presidente de un gobierno democrático durante catorce años y el otro fue vicepresidente de ese mismo gobierno, y pienso que la educación que ambos recibieron no sería como la de alguien que se atreve a decir que un partido donde militan miles de españoles y es la segunda fuerza política de otro gobierno democrático, sea una casa de lenocinio o casa de putas. Los modales como los suyos, E. M. Blanco, muchas personas están demasiado educadas para hablar con la boca llena, pero no se preocupan por hacerlo con la cabeza hueca. Creo que esto lo dijo Orson Welles. Le aconsejo que recuerde que cuando se emplea la pluma como arma deberá recordarse la leyenda de los aceros toledanos: no me saques sin razón ni envaines sin honor. Esto es por si desea rectificar sobre lo que dijo de casa de lenocinio.
Y como postdata le digo que no poseo carnet del PSOE ni de ningún otro partido, solo simpatía por el programa socialista y por algunos de sus dirigentes.
Quede con Dios y reciba un cordial saludo sin acedera.

Juan J. Aranda
Málaga 25 octubre de 2003


REFLEXION Y POSTURA 25/10/03

REFLEXION Y POSTURA
En el periódico El País del domingo 19 de octubre he leído un reportaje sobre un libro que estoy deseando que salga a la venta: “Ceuta, Melilla, Gibraltar, Olivenza. ¿Dónde acaba España? ”, que ha escrito Máximo Cajal, diplomático jubilado y hoy asesor del PSOE en la secretaría de relaciones internacionales socialista que dirige Manuel Marín. Pero advierte que el programa socialista no recogerá para nada sus puntos de vista personales sobre Ceuta y Melilla. Menos mal. Los puntos de vista según se pueden leer en El País son unas “perlas” que merecen ser conocidas por todos los melillenses y ceutíes. Particularmente es a los melillenses a quienes me dirijo porque es en este periódico Melilla Hoy donde se me publican las opiniones que, como ciudadano español y haber nacido en Melilla tengo todo el derecho de expresarlas.
Y a mí, que este hombre me caía bien desde su heroico comportamiento en nuestra Embajada en Guatemala a principios del año 1980 en defensa de los indígenas que allí se refugiaron. Como aperitivo y como encabezamiento del reportaje se puede leer: “ La marroquinidad de Ceuta y Melilla no debe ser puesta en cuestión”. Y a continuación : “por el bien de la salud colectiva de los españoles y para desactivar toda esa mezcla de temor, recelo y resentimiento histórico contra el moro, España debería dar comienzo a una reflexión conjunta con Rabat sobre este delicado asunto. Una reflexión que desemboque en soluciones aceptables para ambos países, pero sin regatear por parte española, cualesquiera que sean sus modalidades y plazos, la definitiva marroquinidad de las plazas”. Y dice que se debería hacer antes incluso de que se resolviera el contencioso de Gibraltar, “ Es mi postura, y yo no pretendo dar lecciones a nadie, pero sí agitar los espíritus y provocar un debate”. Joder con la provocación y el debate. Yo creo que los espíritus están agitados desde siempre con las sempiternas reivindicaciones por parte de nuestro vecino; unas veces en voz baja, otras con los tonos de escalas diatónica y cromática (tomates y Sahara), pero siempre condenados a entendernos, como decía el anterior monarca. Y el debate, pues que quiere que le diga: el señor Cajal es un diplomático y sabrá muchas cosas que gente corriente no entiende, pero sí que sabemos discutir, debatir, luchar por una cosa, sosteniendo opiniones distintas a las suyas. Como bien dice el reportaje, este señor está libre de ataduras oficiales –se ha jubilado-, procurando que la previsible polémica no salpique al PSOE, cuando ya llevaba un año trabajando en su libro. “España debe comenzar una reflexión con Marruecos sobre este delicado asunto sin regatear la definitiva marroquinidad de las plazas”. No sé si este hombre se habrá enterado de que tanto Ceuta como nuestra ciudad, Melilla, hace algún tiempo se le denominaban Plazas Fuertes porque eran poblaciones fortificadas –lo dice el María Moliner-, pero en la actualidad llamarlas así es una falacia, o querer decir una falsedad. Las dos ciudades, gracias a la Democracia (el Pueblo) y a los Padres de la Constitución, (quienes la redactaron en consenso) pueden hoy levantar la cabeza con todo el orgullo y llamarse Ciudades Autónomas con sus correspondientes Estatutos, que bastante trabajo costaron, como cualquiera de las demás Comunidades de España, Reino, Estado, País, Nación; como más les guste nombrarla, porque el castellano lo tenemos tan rico y variado que hay para todos los gustos.
Sobre el problema de Olivenza en la frontera con Portugal dice que en Exteriores no se han enterado hasta hace poco y que la mayoría de los españoles no tenemos noticia. “..... Pienso que difícilmente puede darse marcha atrás a la historia, aunque esta cuestión también quita la razón a Portugal,... reconociendo la lusitanidad de Olivenza... “. En cualquier libro de historia se puede leer que Olivenza fue entregada como dote por Fernando IV de Castilla a su hermana Beatriz cuando esta se casó con el Infante Alonso, hijo del Rey Dionisio, entrando a formar parte de Portugal. Sitiada infructuosamente por los españoles en 1647. Conquistada en 1657. Reintegrada a Portugal por un Tratado en 1688 y definitivamente en 1801, gracias al peso político que tenía Carlos IV por colaborar con las tropas francesas de Napoleón, es España. O sea, que tanto Ceuta como Melilla están tan imbricadas con España que habría que ir “desconchando”, mas bien destejando una a una las tejas o Tratados que ha habido durante cinco siglos. Y ya saben ustedes que cuando en un tejado se levanta una teja (revisión de un tratado) porque la casa se moja, la mayoría de las veces hay que renovar las que están alrededor, y otras hay que levantar el techo porque si no se hace se vendría abajo y se perderían todos los enseres. En este caso las tejas de nuestras ciudades las revisamos nosotros, y cuando hay goteras las arreglamos con nuestras propias tejas entre la gran mayoría de los españoles, excepto algunos que quieren hacerse notar.
No soy diplomático ni sé escribir ni hablar como uno de ellos, pero sí que siento la españolidad de mi ciudad, Melilla, aunque a algunos le suene a patriotero o patriota superficial.
Reciban un saludo.


Juan J. Aranda
Málaga octubre de 2003

SOBRE CALLEJEROS Y UN CHISNETO DE REDOLI 13/10/03

SOBRE CALLEJEROS Y UN CHISNETO DE REDOLI

En este periódico de 28 de septiembre leo que en Puertollano, Ciudad Real, y a iniciativa del melillense Teodomiro Castro Vida, han rotulado una de sus calles con el nombre de nuestra ciudad. En la entradilla del artículo que escribe Sara Sanz se puede leer: “.... El Consistorio de Puertollano, regido por el Partido Socialista, debatió en comisión esta sugerencia y la aprobó en pleno por unanimidad de todos los partidos políticos ” . Como ya dije hace unos días en Fuente del Maestre, Badajoz, también existe una calle con el nombre de Melilla. Y me enteré, como decía, leyendo la etiqueta pegada a la botella del vino “Montepalacio”; buen caldo procedente de ese pueblo pacense. Qué envidia más sana y también que alegría me da. La alegría es que en un pueblo manchego y en otro extremeño hayan rotulado sendas calles con el nombre de Melilla; y la envidia es que en nuestra ciudad aún no me hayan hecho ni puñetero caso (puñetas: adorno en las bocamangas de los magistrados) sobre mi sempiterna reivindicación de una calle para mi maestro de música, don Julio Moreno. Yo digo que si hay que presentar algún escrito sobre mi petición, sirvan mis modestos artículos para que los políticos responsables se den por enterados y me contesten por este mismo medio, que es el mejor de todos; lo digo para que nos enteremos todos los melillenses. Y si es que hay que pasar por la ventanilla de peticiones varias, díganlo de una vez, porfa, porque en la ciudad tengo a varios amigos que lo harían con sumo gusto. Espero que así sea, amén.
Hubo un tiempo que me daba vergüenza, o más bien era timidez, recitar a mi ciudad con un poema de amor como a mi mujer de siempre, guardándolos en secreto como los pétalos de una flor en las páginas de un libro. Pero con el correr de los años y viendo la demagogia, el desbarre y los disparates con que se despachaban algunas personas ignorantes, o con mala leche, de nuestra Historia, la de Melilla, aquí en la Península me dije: “que los jodan”, y me puse, con mi rudimentaria escritura defender, lo mejor que sé, la ciudad donde nací. ¿Que es romanticismo?, pues cojonudo, y viva lo romántico. Los nombres de los amigos verdaderos y los de nuestras patrias chicas hay que hacerlos sonar como monedas de oro y campanillas de amor. Por eso yo, a mis amigos y a Melilla, siempre los hago sonar con la mejor de las melodías; a Melilla con el amor de un hijo agradecido que me parieran en una de sus calles, y a pesar de la distancia rezumando melillismo por todos los poros de mi piel. A un amigo que no veía hacía años y se quejaba de lo malito y viejo que estaba -el hombre es un perfecto hipocondríaco- le comenté que nada envejece mejor que las fotografías, aunque cambien al color sepia. La mayoría de la gente que se queja de haber salido mal en un retrato hay que decirle : “Espera unos años y esa cara que hoy te parece deleznable, un día te parecerá maravillosa”. Yo pienso que la sonrisa de la niñez es la única belleza interna que tiene cada persona durante toda su vida.

EL QUE QUISO DISFRAZARSE DE ADAN
Un célebre marqués que fue invitado
a un baile de disfraces tuvo un plan:
acudir disfrazado, como Adán,
con una sola prenda ataviado.

Pidió a su jardinero que le diera
una hojita apropiada para el traje
no pensaba llevar otro embalaje
que no fuese la hoja de una higuera.

El hombre se probó con mucho celo
su curioso disfraz, mas encontró
que la cosa no estaba bien tapada.

Por ello, consecuente, requirió,
movido por su antojo y por su anhelo,
una hojita un poquito mas holgada.

Mandó en esta ocasión a su pequeño
que transmitió el mensaje, diligente,
pidiendo al hortelano, nuevamente,
una hoja mas grande para el dueño.

El hombre la arrancó de un filodendro
y diósela al muchacho sin mas trabas
y siguió con sus berzas y sus habas
pensando qué sería aquel engendro.

También en esta entrega surgió un pero.
“Dile a Juan que te busque otra mayor”,
le ordenó su papá, con impaciencia.

Y esta vez el discreto jardinero,
intrigado por el plan de su señor:
“¿De qué irá disfrazado su excelencia?”,

en tono socarrón, preguntó al crio.
“Mi papá irá de Adán, aunque haga frío”.
El hombre que no sale de su asombro,

sugiere, con choteo y con salero:
“Di a tu papá que se la cuelgue al hombro
y que vaya vestido de bombero”.

Sonrían y reciban un cordial saludo
Juan J. Aranda Málaga septiembre de 2003


POEMAS SEPTIEMBRE 2003

POEMAS SEPTIEMBRE 2003


Vuestras vidas siempre fueron
fragmentos de zarzuelas.
¿ Adonde fuisteis, papá y mamá,
su música a buscar ?.
Solo tenías setenta y nueve años, mamá,
cuando el señor Altzehimer en niña te convirtió.
Marchaste sin equipaje y desnuda,
¡Tú, tan recatada siempre!,
sin decir a nadie donde ibas.
Huías hacia la nada y
sin apenas voz para despedirte.
Papá, tú, no esperaste mucho tiempo,
solamente cuarenta días, para reunirte con ella.
Por un pequeño alacrán, el muy cabrón,
Que se paseaba, mordiendo tu próstata,
por los caminos urinarios y los del amor.
Sesenta años fueron,
solo sesenta,
los que anduvisteis juntos por la vida.
Siempre fue en Melilla,
nuestra Melilla.


A mis padres














Ana, mi esposa, dulce y fiel compañera,
por las calles de la vida
siempre juntos dondequiera,
amor de tres décadas,
mi vida.

Por tu bondad y tu fidelidad,
cuando el respiro no me alcance,
sé, compañera, que no me olvidarás.





A mi esposa, escrito en una aséptica sala de un hospital en el año 2000



























Melilla alegre y española,
¡ sí, ESPAÑOLA !,
la de calles a cordel tiradas,
la de los parques enrejados,
la del río Oro, que a veces le grita
sin razón alguna, con sus aguas
violentas como león rugiente, y otras
como maullador y ronroneante gato.





A Melilla

























Desde esta playa,
¡ bahía de Málaga, al cielo azul ¡,
Gurugú y Melilla,
de luz y de rocas,
por sus calles es abanicada
y por sus hijos amada.






A Melilla



























Melilla y sus gentes,....... de Del Real,
de Ataque Seco,
de Cabrerizas,
del Tesorillo, .....
La Hija de Marte antaño heroica,
hogaño en paz y sonriente.
Es Melilla española y no doncella,
ya que varias veces mancillada es
por ignorantes compatriotas.




A Melilla

REFLEXIONES Y UN CHISNETO DE REDOLI 28/09/03

REFLEXIONES Y UN CHISNETO DE REDOLI

Leo en este periódico que el señor Gutiérrez, presidente regional del PP, ha contestado al Partido Liberal Marroquí (PLM), partido que se ha sumado a las reivindicaciones anexionistas del vecino país y el que aseguró que la celebración del 17 de septiembre “altera considerablemente las relaciones bilaterales entre ambos estados”. El señor Gutiérrez, muy prudente y diplomático él, le contestó : “No necesitamos maestrillos extranjeros para decir cual debe ser nuestra convivencia”. Lo de maestrillos me gustó. Yo que no soy tan diplomático le diría a los dirigentes de ese partido liberal, que ya me gustaría, si es tan liberal como indican sus siglas, que se metan en las cosas de su pueblo, y nos dejen a los españoles vivir como nos salga de las narices, o si no, como están todos pensando, que para el caso es lo mismo; pero narices queda más fino. Lo que también les diría es que si tienen servidumbre y dependencia del poder central de su gobierno, con su liberalismo luchen por romper esas ataduras que atosigan a los más necesitados de su pueblo y se dejen de tanta demagogia absurda delirante de “las relaciones bilaterales entre ambos estados”, que para eso están los diplomáticos de 1º división y no de su enanismo político de 3ª regional.
Días después leo en “Los Melillenses nos dicen” que un ciudadano fue objeto de una rocambolesca aventura después de ser atropellado en las puertas del Ayuntamiento; magullado por el trastazo, y trasladado al cementerio -eso es lo que pone -, en vez de al hospital, por el que lo atropelló; luego empujado por este al afearle su absurda conducta de llevarlo a ese sitio tan inadecuado. De verdad que parece una escena de película de Berlanga. Ayudado por dos ciudadanos y finalmente trasladado por la policía al hospital. Pues menos mal que llegó y lo pudo contar en estas páginas. De verdad que esto es materia para una película tragicómica, con perdón y mis respetos al accidentado, y despreciando al lebrón por su cobardía que lo dejó en la puerta del cementerio en vez de la del hospital. Espero que este hombre se encuentre bien y si es posible nos comentara a todos los lectores en qué acabó su odisea. Sería muy didáctico su relato.
Leo el 18 de septiembre que “Rafael de Julia abre la puerta grande de la Mezquita del Toreo”. Sobre el nombre de la Mezquita del Toreo a nuestra Plaza de Toros tengo que decir que gracias a José Luís López Blazquez, presidente de la Asociación de Estudios Melillenses (A.E.M.) he ampliado mis conocimientos sobre el tema. Mi amigo José Luís me reafirmó lo que yo sabía a medias, que Gregorio Gorrochano, redactor jefe del “España de Tánger” fue el que la bautizó con el rimbombante nombre de .”Mezquita del Toreo”. Lo que mucha gente ignora, al igual que me ocurría a mí, es que hay otro periodista cordobés de Nueva Carteya, llamado Emilio Amo que la llamó “Catedral Taurina” o “Templo del Toro”. Como verán éste quería que la connotación con el nombre de catedral fuese cristiana-católica, y Gorrochano buscó lo pintoresco del nombre mezquita por estar situada en el norte de África y en una ciudad española frontera con un país musulmán. Ese es mi modesto parecer, y si alguien piensa otra cosa que me lo diga; así estaremos más informados todos.
Y para terminar les diré que existe en el mercado un vino llamado “Montepalacio”, parecido al de Valdepeñas, con 11º grados; pero este es procedente de Fuente del Maestre, Badajoz. Bien, pues la calle donde está instalada la bodega en este pueblo pacense se llama : Melilla, y el nº es el 13. Si tienen ocasión lo podrán comprobar en las etiquetas de las botellas. Asi que si algún responsable político desea agradecerle al alcalde de Fuente del Maestre que el nombre de nuestra ciudad se pueda leer en muchas mesas de hogares y restaurantes de toda España, ya lo pueden estar haciendo. Que sí, que eso, para mucha gente puede parecerles una tontería, pero no me negarán que estando comiendo en un pueblo de Cantabria te sirvan una botella de vino de mesa y leas que la calle donde se elabora este vino lleva el nombre de tu ciudad, Melilla. Mira, quizás sea una pamplina, pero algo de romanticismo tiene la cosa, ¿o no?.

UN BARÓN QUE LLEVABA UNA DONCELLA

Un barón, cabalgando en la espesura,
topóse a una doncella en su camino,
de cabello bruñido y rostro fino
que atrajo su atención por su hermosura.

Pidió que le tomara por amigo
-propuesta que la joven aceptó-
y a lomos del caballo la instaló
llevándole con él a buen abrigo.

“¿Dónde vais, oh señor, con tal doncella?”,
preguntóle un abate algo fisgón.
Respondióle el barón: “Voy a godella.”

“¿A Godella de Asturias o de Aragón”
Ante esta inquisición el noble estalla:
“Os digo que a godella: a fornicalla.”


Reciban un cordial saludo.


Juan Aranda
Málaga 29 de septiembre de 2003

REFRESCAMIENTO 21/09/03

REFRESCAMIENTO DE ALGUNAS MEMORIAS EN ESTADO DE LETARGO VOLUNTARIO

Como ya hacía tiempo que no daba la vara con mi sempiterna reivindicación de una calle para mi maestro de música, don Julio Moreno, aquí estoy otra vez, aunque le moleste a ciertas personas de mi misma cuerda política, la Izquierda, lo cual me importan tres zigotos, que casualmente lo mismo se escribe con C que con Z. Me he propuesto no ser procaz y a las palabras malsonantes revestirlas con lo mejor que sé; yo he cursado mis estudios primarios en el Colegio de Ataque Seco, hoy España, colegio público de los llamados “de balde” con don Domingo Pérez Morán autor de: A estos que los fusilen al amanecer, maestro que también impartió clases a muchos que hoy son de “izquierdas de toda la vida”.
No sé si algunos de ustedes conoció a don Julio allá en los años cincuenta, yo sí que lo conocí, al igual que algunos que hoy son también de “izquierdas de toda la vida”, y que con diez o doce años vestíamos la camisa azul con las cinco flechas y el águila ( el cangrejo y la gallina decían) en sendos bolsillos, y tocado con la boina roja de los requetés, y lo bien que tocábamos en las procesiones y en los conciertos en el Parque Hernández. De verdad que era una delicia ver y oír a treinta o cuarenta chaveas enzarzados con una obertura de cualquier ópera, o con una zarzuela, o con una marcha militar o pasacalle, y es que don Julio, que también vestía su camisa azul, era un excelente profesor de música, y con una paciencia parecida a la de Job. Claro que a aquéllos niños, ahora que los gobernantes son elegidos por los ciudadanos mediante votación y no gobernados estos por un dictador que asume todo el poder sin ser responsable ante nadie, “solo ante Dios y ante la Historia”, mucha gente nos llaman fachas, (del latín fascula cruzándola con fascis, antiguamente hacha, desembocando en fascista). Aunque algunos somos de izquierdas desde que nuestras mentes comenzaron a discernir viendo el ambiente político en otras ciudades, el asistir a románticas charlas clandestinas donde se hablaba de democracia y redistribución de la riqueza; leyendo libros de personas que los escribieron con objetividad y fueron publicados en otros paises, ya fueran de un bando como de otro; perteneciendo y militando activamente desde los puestos de trabajo en los incipientes sindicatos de obreros, no verticales por supuesto, sin liberarse de las horas de trabajo, siempre en el tajo y perseguidos y suspendidos de empleo y de sueldo, y a veces dolorosamente incomprendidos y atacados, debido al miedo que observaba por sus mismos compañeros; intentando comprender el laicismo que se veía en algunas capas sociales. Todo esto ocurría a principios de los setenta y en España aún residía en El Pardo el anciano general. Otros, por su posición y residencia en según que ciudad o pueblo se acomodaron como los mochuelos en los olivares en sus trabajos más o menos remunerados bajo el paraguas que esos compañeros les iban proporcionando lentamente, y cuando ya se vislumbraban las grandes alamedas donde los obreros podían pasear libremente, como dijo Allende horas antes de su asesinato en el Palacio de la Moneda por el sátrapa Pinochet, estos mochuelos volaron de su olivo, guardando sus camisas azules, por si un casual, salieron a la calle con sus banderas de la libertad al viento convirtiéndose en gente “de izquierdas de toda la vida”. Yo pienso que no hace falta recordar constantemente el pasado para saber que forma parte de nuestra vida actual, mal que les pese a algunos. Aunque de vez en cuando, y para que no se les olvide por sus críticas malévolas que ellos mismos se hincan como estacas, hay que hacerles un breve comentario para que recuerden donde estaban ayer y donde se encuentran hoy. También en la actualidad no habría que tomar mucho en cuenta a Machado cuando dice : “Españolito que vienes al mundo te libre Dios que una de las dos Españas ha de helarte el corazón”. Yo pienso que esa página de nuestra historia la tenemos bien aprendida y también que los jóvenes actuales la han superado con creces.
No sé si sabrán que en Santander existe una plaza muy céntrica que lleva el nombre de Juan Carlos I, en cuyo centro se puede ver una estatua con la figura ecuestre de Franco toda sucia de cagadas de palomas –yo la vi hace pocos días-, a la que los santanderinos llaman desde siempre Plaza del Ayuntamiento. Según me comentaba un amigo a esa plaza desde hace varios años la llaman “Plaza de los Cojones”. Ya se imaginaran ustedes porqué necesariamente sigue allí la estatua de Franco. Yo saco la misma analogía con la melillense calle de Napoleón. Sé que mucha gente se preguntará qué hizo Napoleón por Melilla, qué gesto heroico le tiene que agradecer la Ciudad a ese general; a quién se le ocurrió la brillante idea de rotular una calle con el nombre de un general que invadió España y tantas vidas costó; les recomiendo a Galdós en varios de sus “Episodios Nacionales”, emociónense escuchando una de las piezas musicales más sublime y patriótica de nuestra Historia : “El Sitio de Zaragoza”, o la leyenda que se podía leer en los antiguos billetes de dos mil pesetas de las antiguas idem : “.... Y entre los muertos habrá siempre una lengua viva para decir que Zaragoza no se reinde” . Pero el colmo del sarcasmo, y si no compruébenlo ustedes mismos, es que a solo escasos metros de allí, en el Tesorillo, existe una plaza con los nombres de dos héroes del 2 de Mayo, Daóiz y Velarde, donde cada año se le rinden merecidos homenajes. Y yo, con mi jilipollesco romanticismo trasnochado, y en recuerdo de un hombre bueno que enseñó música a varias generaciones de niños melillenses -que hoy somos de izquierdas y de derechas, ¿ de toda la vida ?- le reivindico una calle, aunque sea en el último rincón más humilde del barrio más extremo de la ciudad, me nieguen, me tachen esa reivindicación por haber enseñado en el único sitio que existía en Melilla, la Organización Juvenil Española ( OJE ) o la Falange, para forjar la base cultural del arte de la música. Este lugar es el que hoy reniegan muchos de “izquierdas de toda la vida”, y que también hicieron muchos fuegos de campamentos en Rostro Gordo, recibiendo doctrinas del Régimen, cantando Prietas las Filas y asistiendo a misas de campamento; que jugaron a las damas y al billar en los bajos de la Casa Nacional Sindicalista, (Comemos Nosotros Solos) y al balón-cesto en la Plaza Bandera de Marruecos, y también las “guardias sobre los luceros” cada 20 de noviembre en la Cruz de los Caídos, fecha de la muerte de José Antonio, -lo digo para no confundir a los jóvenes con la de Franco, que también fue el 20 de noviembre de 1975- y también cómo entrábamos en las clases en los colegios en fila militar de tres en fondo después de haber cantado Montañas Nevadas o Yo tenía un Camarada después de izadas las tres banderas en el patio, con el trozo de queso en una mano y el vaso de leche en polvo en el estómago, que menudas cagaleras te entraban a veces si la tomabas fría en pleno invierno.
Madame de Sevigné, decía: “ Si los hombres han nacido con dos ojos, dos orejas y una sola lengua es porque se debe escuchar y mirar dos veces antes de hablar ”.
Como ya digo anteriormente y para clarificar y no haya nada de duda en lo que han leído: soy hombre de Izquierdas, simpatizante del Partido Socialista Obrero Español y no tengo ningún carnet de ningún partido. “Y ahora ve y lo cascas” (es broma).
Reciban un cordial saludo.